VISION-Y-CONDUCCION

La Importancia de una Buena Visión para Conducir

 

VISION-Y-CONDUCCION

La conducción de vehículos es un acto complejo y peligroso en el que entran en juego múltiples factores, siendo la vista el más importante de todos. El 90% de información que recibimos al conducir nos llega a través de la vista, de ahí que las condiciones visuales sean determinantes.

Para conducir se requiere una visión de calidad más que de cantidad.

La calidad viene determinada por un correcto equilibrio entre los distintos aspectos que integran la función visual:

  • Agudeza visual
  • Visión de profundidad
  • Campo visual
  • Adaptación a los cambios luminosos
  • Visión de colores
  • Movilidad ocular

Todas aquellas alteraciones o enfermedades que produzcan una disminución o la falta de uno o más de estos aspectos dará lugar a una visión de inferior calidad por lo que estos conductores pueden tener más dificultad a la hora de calcular distancias, velocidad y a la hora de conducir en determinadas condiciones extremas.

Las enfermedades oculares como cataratas, retinopatías, glaucoma, etc; o las generales como la diabetes o hipertensión arterial, que deterioran la capacidad visual no conllevan siempre la pérdida del carnet, dependen del estado y del control de la enfermedad.

Sólo el control periódico podrá detectar a tiempo cualquier cambio y poder efectuarse el tratamiento adecuado para estacionar o incluso revertir la enfermedad.

En la conducción nocturna se  producen accidentes más graves que los que se producen durante el día.

Esto implica que la conducción nocturna requiere tener mejor visión y que sea de buena calidad. La agudeza visual en condiciones de poca luz baja un 20% esto se agravará aún más si presenta alguna alteración visual añadida (glaucoma, miopías severas, cataratas, etc.)

La fatiga ocular también es un factor importante, está relacionada con los defectos de refracción, también con los trastornos de la movilidad ocular, con la sequedad ocular que se manifiesta tras un tiempo variable de conducción, con la velocidad, con la conducción nocturna, trafico intenso.

Se manifiesta por una disminución del parpadeo, lo que da lugar a una sensación de picor, quemazón y la necesidad de frotarse los ojos, siendo este último signo premonitorio de somnolencia.

Como consejos:

  • No esperar a que se nos caduque el carnet para revisarse la vista
  • Si usa gafas graduadas llevar siempre la graduación correcta
  • Usar gafas de sol para protegernos de los rayos UV y evitar deslumbramientos

En caso de padecer alguna alteración o enfermedad visual:

  • Aumentar la distancia de seguridad
  • Disminuir la velocidad
  • Procurar no hacer viajes largos o descansar más a menudo
  • Sobretodo hacerse exámenes visuales cada año o seis meses.

 

 

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